Galerías de la muerte

Un día importante, una gran exposición, un tema que trata sobre el dolor y el sufrimiento, una representación excelente, en vivo y en directo, bajo los ojos de las bestias que carecen de escrúpulos...
Guillermo Vargas Habacuc es su nombre, fiera que se rebeló ante la sensibilidad humana, y con golpes de martillo, destruyó en pocos días, lo que las asociaciones por los derechos de los animales llevan luchando. Ese individuo se hace llamar artista. Se tomó la libertad de abusar de la mirada perdida de un pobre animal que vivía abandonado en la calle, pues su idea de crear polémica fue un sueño, que no tardó en hacerse realidad.
Prisionero de un cordón, atado, sin poder desplazarse, en un remoto rincón de una Galería de arte.
La criatura desfallecida fue el objetivo de numerosas miradas que observaban su lenta y dolorosa muerte que la sed y el hambre le proporcionaban, mientras que, el reflejo de vida que brillaba en sus ojos, se iba apagando hasta el punto de fallecer públicamente.
La bestia en cuestón ganó por este acto de crueldad, que su nombre reluciera entre los más prestigiosos e innovadores, a la par de aquellos que le tachan de inmoral e inhumano.
Una copa de champagne francés y un par de canapés de caviar fue lo mejor para acompañar a la dulzura que tiene la muerte de un perro, que no ya suficientemente torturado por la vida, tras vivir en la calle, escapando del hambre y del frío, fue víctima de la voluntad de esta persona.
Su sufrimiento, que generó placer a los asistentes, una muerte pública que quedará siempre grabada en la memoria negra de aquello que algunos llaman arte.
Carlos.
BOICOT a HABACUC, firmen aquí:
http://www.petitiononline.com/13031953/petition-sign.html?

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